El pasado miércoles tuvimos ya la última clase de Biblioteconomía y en ella continuaron las exposiciones de los alumnos del curso, siguiendo así con las iniciadas la semana anterior. Los temas tratados fueron muy parecidos, ya que, entre otras cosas, los compañeros tenían que presentar también lo que han ido a lo largo de la asignatura y lo que han aprendido desde octubre.
Carmen Ana fue la primera en exponer su trabajo. Hizo un recorrido por sus entradas de la wiki y por su blog, en las que ha intentado plasmar sus impresiones y reflexiones en lugar de aportar simples nociones teóricas. Además, ha hecho un gran número de presentaciones con diapositivas sobre los temas tratados en clase y los ha puesto a disposición de todos los usuarios, para que de una manera más amena y sencilla puedan acceder a lo que hemos aprendido en clase y utilizarlos bajo las mismas condiciones que ella establece. Tal y como Carmen recalcó, todos somos información y debemos aprovechar estas nuevas formas de expresiones para que todos podamos sacar provecho del saber colectivo.
Rocío Moreno continuó hablando sobre las entradas subidas a internet, inspiradas muchas de ellas en noticias actuales de periódicos digitales. Dijo que el concepto tradicional de biblioteca está cambiando hacia las nuevas tecnologías y hacia un aprovechamiento diferente de los espacios donde la interactuación es mayor entre los visitantes. Destacó que las competencias digitales son fundamentales para el buen uso de la información y que las redes sociales fomentan también las relaciones entre las personas y el flujo de información entre todos. Rocío nos dejó con una interesante frase, afirmando que el tiempo avanza, la tecnología cambia y tenemos que adaptarnos a ellas para seguir adelante.
Marina repasó la estructura de su blog y los contenidos de este y de la wiki. Tras estos meses, ha descubierto que las bibliotecas no son simplemente un lugar de estudio, sino un sitio de encuentro social donde las nuevas tecnologías han cambiado la forma de ofrecer la información. Valora aún más la importancia de la web 2.0 y de las TICs como medios para interactuar con otras personas y subrayó también la utilidad de las competencias digitales para enriquecer y facilitar nuestro trabajo universitario.
Rafa hizo una crónica muy interesante sobre sus artículos. Desde la biblioteca donde tantas horas ha tenido que echar con los buenos recuerdos de las pausas entre tema y tema, hasta bibliotecas alternativas autofinanciadas o editoriales independientes. Por otro lado, señaló que las redes sociales le han puesto en contacto con otras personas que no conocía de nada, pero que ahora comparten impresiones sobre sus no tan comunes gustos musicales.
La quinta en exponer fue Ángela, que mencionó algunos pros y contras de la nueva sociedad digital, quizás más fría, pero que elimina muchas barreras sociales. Considera que las nuevas posibilidades que nos ofrece la web 2.0 unidas a las competencias digitales, facilitan el acceso a la información tan útil para los estudiantes. Además, estas características aplicadas a las bibliotecas y a las universidades hacen que estas sean más flexibles y se adapten cada día más a nuestras necesidades.
Antes de comenzar el curso, la identidad digital de Rocío Jiménez era escasa, pero tras él, está presente en muchas de las aplicaciones de las redes sociales que marcan nuestro día a día. También ha pretendido plasmar sus opiniones en la web y no solo información, ya que todo el mundo acceder a ella a través de otros medios. Al entrar en su blog, podemos leer sus experiencias, noticas de actualidad o toques de humor con viñetas de Mafalda y Forges relacionados con este nuevo mundo digital. Finalmente, indicó que la educación e internet no tienen porque estar enfrentados, sino que hay que enseñar a usar el medio y no prohibirlo.
Por último, Araceli enumeró algunas de sus comentarios realizados sobre la temática del curso, las visitas o sobre noticias de actualidad sobre estos asuntos. Un ejemplo de estos, es en el que habla sobre lo lejos que pueden llegar las nuevas tecnologías, siendo ya casi posible cuidar de una persona mayor a través de estas. Tampoco ha dejado de lado las bibliotecas especializadas, las universitarias y el contenido y el funcionamiento de estas instalaciones.
De nuevo, tras una sesión relajada y distendida, manteniendo el ambiente motivado en estos meses, felicito igualmente a los compañeros que el pasado miércoles clausuraron el curso. Cada uno de ellos, tantos los de esta semana como los de la pasada, han reflejado sus sinceras opiniones marcadas por su estilo personal.
Aprovecho este rinconcito para agradecer humildemente a mis colegas de biblioteca, incluyendo la profesional que nos ha guiado, todo lo que me han aportado a través de sus valiosas reflexiones y de sus diferentes puntos de vista. Y no solo en estos últimos días, sino también a lo largo de estos meses en los que he podido volver a conocer a tan amables y acogedores camaradas tras tres años de carrera. Enhorabuena por vuestro trabajo y motivación. ¡Nos vemos por la UPO o por la nube!
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