El pasado 11 de noviembre de 2009, los alumnos de biblioteconomía de
El fondo antiguo tiene unas 12 000 microfichas. Esta suma se conforma principalmente de fotos de los siglos XV y XVI que provienen de
Tras este preámbulo, el bibliotecario nos mostró varias de las miles de joyas que conserva la universidad. Desde el siglo XVIII retrocedimos hasta el XV aprendiendo la historia, analizando la encuadernación y anotando curiosidades de los títulos seleccionados. Enciclopedias, bibliografías, ejemplares religiosos y de historia, volúmenes facticios e incluso un índice de libros prohibidos. Observamos diferentes técnicas de encuadernación, como la holandesa con el lomo de piel y la cubierta de otro tipo de material; la española, oscura y con dorados en el lomo; la de encofrado, humedeciendo el cuero para convertir la cubierta en un material muy duro y resistente o el estilo italiano con colores pastel.
Las obras presentan unos magníficos grabados que ilustran su contenido. Para plasmar el detallismos de estos diseños se empleaba el grabado calcográfico (de cobre) o el xilográfico (de madera). Tanto los dibujos, como la tipografía estaba fuertemente marcados por la corriente artística de la época y cabe destacar el clásico estilo gótico alemán o la letra redonda italiana.
A través de los archivos personales de Antonio Delgado o de los Montoto, de dictatas, diarios de navegación o códices anteriores al siglo XVI hasta llegar a una biblia latina de 1430, cualquier ciudadano puede dar un paseo por la historia gracias al gran tesoro, desconocido para muchos, de más de 500 años de historia que guarda nuestra ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario