Hasta hace poco, la información solo estaba recogida en los libros bajo el nombre de un autor. Ahora, todo se difunde por la red a la velocidad de la luz y, a través de miles de canales diferentes, una idea se transmite y se transforma en cuestión de segundos dejando atrás la identidad de la fuente origen y de su creador, en muchas ocasiones.
Por ello, muchas veces se comete plagio. Cuando pensamos en este término, lo primero que se nos suele venir a la mente son casos en los que textos y letras de escritores o cantantes son copiados por otras personas para publicar documentos como si su contenido fuera inédito y sin reconocer la autoría original.
Hay muchos casos escandalosos que salen a la luz pública porque lo cometen personas conocidas,como cuando una famosa periodista española copió fragmentos de otro libro al elaborar el suyo:
«No quiere casarse conmigo, señorita Price?
-No -contestó Faye, levantándose de repente. -¿Adónde vas?
Faye se volvió a mirarle desde el centro del blanco cuarto de baño en todo el esplendor de su soberbia belleza desnuda.
-No pienso decirles a mis hijos que su padre se me declaró en la bañera. ¿Cómo podría decirles semejante cosa? -anadió mientras él la miraba con expresión divertida».
'Álbum de familia', de Danielle Steel
«¿Quiere usted casarse conmigo?
-No -contestó Adriana levantándose de repente.
David se quedó confuso ante la rapidez de la negativa. -¿Adónde vas?
Adriana volvió a mirarle desde el centro del cuarto de baño en todo el esplendor de su soberbia belleza desnuda.
-Si algún día tenemos hijos, no pienso decirles que su padre se me declaró en la bañera. ¿Cómo podría decirles semejante cosa? -añadió echándose a reír mientras él la miraba con expresión divertida.
'Sabor a hiel', de Ana Rosa Quintana
O cuando un compositor español hizo lo propio al calcar la melodía de una canción extranjera ya existente:
Pero nosotros mismos cometemos plagio hasta sin ser conscientes de ello.Al hacer un trabajo para el instituto o para la universidad es muy sencillo recopilar la información recurriendo al copy and paste para reunir parte de la gran cantidad de datos que encontramos en la web. A parte de no desarrollar así nuestra capacidad de expresión, razonamiento y redacción de contenidos, estamos cometiendo plagio, porque al copiar y pegar la información la plasmamos como nuestra y no citamos ni hacemos referencia al que realmente dictó esas líneas.
También conocemos ya el famoso Copyright y toda la controversia que este provoca. A través de este, un autor se reserva todos los derechos sobre su obra y cualquiera que quiera hacer uso de su contenido tiene que pagar por ello. Pero quizás son menos conocidos otros tipos de derechos no tan restrictivos que defienden la autoría de un trabajo.
Uno de ellos es el Creative Commons, que nos permite reservar algunos derechos sobre una idea. Es un servicio que no nos cuesta dinero y que de forma más sencilla permite tanto que compartamos y aportemos nueva información a la sociedad, como que esta pueda aprovechar los datos libre y respetuosamente.
Se pueden combinar cuatro tipos de condiciones para reservar los derechos de autor: el primero es del simple reconocimiento de autoría del documento; a continuación encontramos que el productor no quiera que otros saquen beneficio económico de trabajos derivados del suyo; en tercer lugar, que no se creen escritos basados en el original y, por último, se puede establecer que los demás compartan sus nuevos documentos bajo las mismas condiciones que el inventor estableció.
Y de estos conceptos, tal y como se explica en la página web oficial de la compañía, encontramos las siguientes seis licencias:
Reconocimiento (by): Se permite cualquier explotación de la obra, incluyendo una finalidad comercial, así como la creación de obras derivadas, la distribución de las cuales también está permitida sin ninguna restricción.
Reconocimiento - NoComercial (by-nc): Se permite la generación de obras derivadas siempre que no se haga un uso comercial. Tampoco se puede utilizar la obra original con finalidades comerciales.
Reconocimiento - NoComercial - CompartirIgual (by-nc-sa): No se permite un uso comercial de la obra original ni de las posibles obras derivadas, la distribución de las cuales se debe hacer con una licencia igual a la que regula la obra original.
Reconocimiento - NoComercial - SinObraDerivada (by-nc-nd): No se permite un uso comercial de la obra original ni la generación de obras derivadas.
Reconocimiento - CompartirIgual (by-sa): Se permite el uso comercial de la obra y de las posibles obras derivadas, la distribución de las cuales se debe hacer con una licencia igual a la que regula la obra original.
Reconocimiento - SinObraDerivada (by-nd): Se permite el uso comercial de la obra pero no la generación de obras derivadas.
Y todos estos procesos entran en el campo de la ética. Cuando alguien crea algo, dedica horas y horas de búsqueda de información, de documentación, de estudio y de investigación. Un trabajo muy laborioso y elaborado que, pese a que realmente no hay dinero que compense el esfuerzo realizado, el inventor merece, al menos, que los demás le reconozcamos como tal y que no intentemos suplantar ese papel gratuitamente.